¿Alguna vez te has imaginado cómo se verían los neumáticos de tu coche de diferentes colores? O te has preguntado. ¿Por qué todos son de color negro? La explicación tiene mucho que ver con la forma en que actualmente se producen. Sin embargo, al inicio de la historia del automóvil, el color de las llantas era diferente, blanco para ser más preciso. En este artículo te contamos más acerca de este interesante tema.
El primer color de las llantas
Junto con su forma circular, el negro es una de las principales características de las llantas. Sin importar el tipo de vehículo en que pensemos, ya sean automóviles particulares, tractores, montacargas y hasta aviones, todos asociamos las ruedas con dicho tono. Sin embargo, esto no siempre fue así, el blanco fue el primer color que tuvieron. La razón es muy sencilla: el material con el que estaban elaborados es de tonalidad clara y, al no añadirle ningún tipo de tinte, el resultado eran neumáticos blancas.
A finales del siglo XIX, las llantas eran producidas a partir del caucho extraído del árbol llamado Hevea Brasiliensis, procedente de la zona cercana al río Amazonas, en Sudamérica. En este primer momento de la historia de los automóviles, el incremento de su uso trajo consigo nuevos retos para la industria de los neumáticos. Debido a que la demanda era satisfecha por completo gracias a esta planta, la necesidad de innovar vino desde otro ángulo, el estético.
Como todos sabemos, el blanco es un imán para la mugre por lo que era común para los propietarios de automóviles que sus llantas tuvieran un aspecto sucio. Esto provocó la inconformidad ante los distribuidores. De esta manera, se comenzó a investigar hasta que se dio con el negro de carbón, un polvo derivado de la combustión de productos derivados del petróleo, el cual se añadió a los neumáticos para darles el característico color oscuro y así disimular la suciedad.
El color definitivo de las llantas
En realidad, la ocurrencia de añadir este elemento fue aún más fortuita que solucionar el reclamo estético. El nuevo y definitivo color de las llantas, el negro, también logró que éstas fueran cinco veces más resistentes que cuando eran blancas. Algo que, por obvias razones, revolucionó la industria de la rueda.
La causa detrás de este beneficio es que el color negro absorbe mejor los rayos ultravioleta, causantes del deterioro por endurecimiento de las llantas. El uso del negro de carbón se popularizó a lo largo del mundo y las diversas productoras de neumáticos lo utilizaron a partir de su aplicación.
El color negro de las llantas desde entonces se ha mantenido hasta la actualidad. En décadas posteriores se retomó la idea de los neumáticos de diferentes colores, pero con fines meramente estéticos. Por ejemplo, los llamados autos clásicos de la década de 1950 utilizaron ruedas bicolores blanco y negro, pero sin un impacto más trascendental.
La historia de las llantas es curiosa e interesante. A veces algo que es común en nuestros días como el color negro de los neumáticos fue radicalmente diferente en el pasado.
Cuéntanos si conocías acerca de los neumáticos blancos y compártelo con tus conocidos y síguenos en nuestras redes para estar